PENTECOSTES:
EL ALIENTO
PARA LA” NUEVA CREACION”
– PARA NUESTRA VIDA.
Al anochecer estaban los discípulos en una casa con las
puertas cerradas por miedo. Y entro Jesús se puso en medio y les dijo “paz a
vosotros”... como el Padre me ha enviado así también os envío yo. Y dicho esto,
exhaló su aliento sobre ellos y les dijo : Recibid el Espíritu Santo...
ENTRA EN TU INTERIOR
Jesús entra y se puso en medio de ellos, se pone al abasto
de todos, de todas las miradas y rompe con el miedo que paraliza. Si abrimos
nuestro corazón y dejamos que lo habite el aliento de Dios, percibiremos el
gozo, la fuerza necesaria para acabar con la oscuridad y llenarnos de la luz,
del Amor del Padre.
Los discípulos como “seres nuevos”, llenos del aliento del
Espíritu deberán continuar la misión del “Cordero que quita el pecado del mundo”.
¿Cómo experimento el aliento del Espíritu? ¿Soy consciente que tu soplo de vida
nueva alcanza mi corazón?
El Espíritu estuvo presente al inicio de la vida pública de
Jesús y está también al comienzo de la actividad misionera de la Iglesia.
También nosotros somos enviados a anunciar la Buena Noticia en nuestro entorno,
a hacerla participe a los que nos rodean con nuestro ejemplo de vida renovada.
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