domingo, 25 de agosto de 2019


¿COMO ACCEDER POR LA PUERTA DE LA SALVACIÓN?
Jesús recorría ciudades y aldeas enseñando, mientras caminaban hacia Jerusalén. Y uno le dijo:
-Señor, ¿son pocos los que se salvan?
Él les contestó: -Esforzaos para entrar por la puerta estrecha, porque os aseguro que muchos intentarán entrar y no podrán. 
ENTRA EN TU INTERIOR
El texto del evangelio de Lucas de este domingo versa sobre la salvación, mediante la pregunta ¿son pocos los que se salvan?, o también se podría traducir como: ¿serán muchos los que se condenen? La salvación parece más bien una cuestión de estadística, ¿Qué porcentaje nos salvaremos? Pero Jesús responde sobre “quienes” y “como”, Jesús plantea  la respuesta no cuantitativamente- cantidad-, sino que da un giro y apunta a lo que realmente importa y responde en base cualitativa – de calidad. Estamos todos invitados a acceder, sin importar nuestra procedencia (oriente, occidente, norte o sur), un banquete que va más allá de fronteras, la salvación viene en como vivamos nuestra fe, como dejamos bella impronta en los corazones de los hermanos, en poner los medios para empequeñecer nuestro ego eliminando “apEGOS” para acceder por la puerta estrecha. Pero tal vez hoy los grandes egos nos distraen y nos ensanchan, vivimos en la inmediatez: ¿Qué puedo hacer para vivir mejor?, no importa el mañana vivimos en un hoy permanente y en un yo egocéntrico que nos impide ver más allá. Lo triste es que seguramente hoy le preguntaríamos ¿Qué tengo que hacer para salvarme YO? ¿Qué régimen dietético hacer para adelgazar y caber con holgura? Están terminando las vacaciones, estamos a tiempo entremos en nuestro interior, pongamos en marcha y pongámonos en marcha para vivir con todo corazón el evangelio, disfrutando de nuestra vida como un don de Dios, pues el camino de salvación consiste en ser un don de Dios para ser don para todos.



domingo, 18 de agosto de 2019



TU FUEGO PRENDE NUESTROS CORAZONES
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: "He venido a traer fuego a este mundo, y ojalá estuviera ya ardiendo! Tengo que pasar por un bautismo, y qué angustia hasta que se cumpla! ¿Pensáis que he venido a traer al mundo paz?...
ENTRA EN TU INTERIOR
El Evangelio de este domingo, nos puede resultar desconcertante en un primer momento, Jesús nos sorprende con su palabra, ardiente como el fuego y cortante como una espada. Jesús dice a sus discípulos y también hoy a nosotros : “He venido a prender fuego en el mundo; ¡y ojalá estuviera ya ardiendo!”.  Contemplemos el relato y descubriremos su sentido en nuestro corazón, hallaremos la fuerza de sus palabras ya que, Jesús habla del fuego de su amor, del fuego del evangelio, del fuego de su ejemplo, que espera sea contagioso y que prenda nuestro interior. Dos discípulos camino de Emaús experimentaron el fuego en su corazón cuando andaban con Jesús sin reconocerle y se decían: “¿No ardía acaso nuestro corazón, mientras nos hablaba en el camino y nos explicaba las Escrituras?”. Jesús nos trajo ese fuego de amor que transforma nuestro corazón y lo purifica. Juan Bautista bautizaba con agua, pero después de él, Jesús habría de bautizar por medio del fuego (Lc 3,16). Aquí, la imagen del fuego queda asociada a la acción del Espíritu Santo que descendió el día de Pentecostés bajo la imagen de lenguas de fuego. También en la oración de Invocación al Espíritu:


Ven, Espíritu Santo,
llena los corazones de tus fieles,
y enciende en ellos el fuego de tu amor.

Ser fuego, reavivar el fuego interior, alumbrar, dar calor… Jesús nos  trae fuego por que no nos quiere tibios e indiferentes, no olvidemos ser fuego, vivir el bautismo, experimentar el Amor y con la fuerza del Espíritu vividlo, proclamarlo, sembrarlo y gozarlo

jueves, 15 de agosto de 2019


MARÍA, LA MUJER VESTIDA DE SOL
María se puso en camino y fue aprisa a la montaña, a un pueblo de Judá; entró en casa de Zacarías y saludó a Isabel…Se llenó Isabel de Espíritu Santo y dijo : - ¡Bendita tú entre las mujeres y bendito el fruto de tu vientre!...¿Dichosa tú que has creído!, porque lo que te ha dicho el Señor se cumplirá. María dijo: - Proclama mi alma la grandeza del Señor, se alegra mi espíritu en Dios, mi salvador, porque ha mirado la humillación de su sierva….
ENTRA EN TU INTERIOR
María asunta al cielo, es modelo de la mujer creyente, agradecida y glorificada. El camino de María hacia el cielo comenzó desde ese “SI”, pronunciado al Señor en Nazaret  libre y generosamente y su gloria tiene como raíz su fe vivida y expresada en el gozo y en el dolor. Celebramos la Asunción de Nuestra Madre, la Virgen María a los cielos, síntesis de todas las fiestas marianas,  la fiesta llena de profundo significado y simbología,  es la fiesta de la Pascua de María, es la culminación de una vida fiel y de un “SI” permanente a Dios. Si, así es la mujer María que proclama la grandeza del Señor y es proclamada bienaventurada por todas las generaciones, como  oímos en el Evangelio. Es el día de la esperanza, día esperanzador en que empieza la promesa del Señor hecha también a nosotros” el que cree en mi tiene vida eterna y yo lo resucitaré el último día”. María nuestra Madre nos precede a compartir la presencia de Dios. Ella cantó el Magnificat y nosotros Madre lo repetimos de generación en generación en el transcurso de  nuestra vida. Ojala sigamos la estela de su estrella, para que guiados por ella, nos conduzca y alcancemos la resurrección que Cristo ganó para nosotros en su resurrección.


domingo, 4 de agosto de 2019



TU ERES MI RIQUEZA
En aquel tiempo, dijo uno del público a Jesús: "Maestro, dile a mi hermano que reparta conmigo la herencia." … Y dijo a la gente: "Mirad: guardaos de toda clase de codicia. Pues, aunque uno ande sobrado, su vida no depende de sus bienes." Y les propuso una parábola: "Un hombre rico tuvo una gran cosecha. Y empezó a echar cálculos… Pero Dios le dijo: "Necio, esta noche te van a exigir la vida. Lo que has acumulado, ¿de quién será? 
ENTRA EN TU INTERIOR
 El evangelio de Lucas de este domingo se le conoce como el rico necio  y se estructura en tres partes:  el hombre que pide la intervención de Jesús para que su hermano reparta la parte de la herencia, la parábola del rico necio, y como enriquecernos a los ojos de Dios. Jesús nos invita esta semana  a hacer inventario en nuestro corazón. Observar y analizar lo que da sentido a nuestra vida,  si el tener – poseer – acumular – idolatrar falsos valores (dinero, fama, poder..) o si por el contrario nuestro valor es dar sentido a nuestra vida. La verdadera Vida no depende de tener más o menos sino de ser en plenitud, ahí está la riqueza, la felicidad. No hay persona más pobre que aquella que atesora pobreza en el corazón y que solo tiene riquezas materiales en el exterior. Jesús no está criticando la previsión, ser previsor es una actitud positiva, pero no podemos acumular con el único fin de atesorar, el tesoro no está en codiciar y poseer cosas,  sino  en el  ser: ser fraternidad, ser solidaridad….  Jesús nos propone ser “ricos” en la verdadera riqueza,  la riqueza que perdura para siempre, riqueza centrada en Dios. La felicidad no la encontraremos en aspectos y bienes externos sino que emana de nuestros corazones, pues es en nuestro interior donde mora nuestra riqueza, donde anida el Espíritu de Dios. Tras entrar en mi interior y hacer balance e inventario a mi corazón ¿Qué he encontrado en él?