LA PALABRA: EXISTÍA, ESTÁ Y ERA DIOS
JESÚS: DIOS EN MEDIO DE NOSOTROS
En el principio existía la Palabra y la Palabra estaba junto
a Dios. Él era la luz verdadera que alumbra a todo hombre. Y a los que creen en
su Nombre les dio poder de ser hijos suyos. Y la Palaba se hizo carne y habito entre nosotros. A Dios
nadie le ha visto: el Hijo único, que
está en el seno del Padre, es quien lo ha dado a conocer.
ENTRA EN TU INTERIOR
Jesús verdadero Dios y verdadero hombre, se hace presente en
medio de nosotros y de nuestra vida, como la Imagen y la Luz más
resplandeciente de Dios.
La Palabra “vino a los suyos, pero los suyos no la reconocieron”.
Aceptar a Cristo implica aceptar su Palabra como verdad, luz y vida.
¿Dejo que Dios ilumine mis realidades?
Nosotros profesamos nuestra fe diciendo:
Creo en un solo Señor, Jesucristo,
Hijo único de Dios,
nacido del Padre antes de todos los siglos:
Dios de Dios,
Luz de Luz,
Dios verdadero de Dios verdadero,
engendrado, no creado,
de la misma naturaleza del Padre,
por quien todo fue hecho;
que por nosotros lo hombres,
y por nuestra salvación
bajó del cielo,
y por obra del Espíritu Santo
se encarnó de María, la Virgen,
y se hizo hombre.
Hijo único de Dios,
nacido del Padre antes de todos los siglos:
Dios de Dios,
Luz de Luz,
Dios verdadero de Dios verdadero,
engendrado, no creado,
de la misma naturaleza del Padre,
por quien todo fue hecho;
que por nosotros lo hombres,
y por nuestra salvación
bajó del cielo,
y por obra del Espíritu Santo
se encarnó de María, la Virgen,
y se hizo hombre.
¿Soy lo suficientemente contemplativo para poder percibir y
experimentar la Palabra de Dios?
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