domingo, 30 de junio de 2019


QUIEN ERES PARA MI
Al llegar a la región de Cesarea de Filipo Jesús preguntó a sus discípulos:"¿Quién dice la gente que es el Hijo del hombre?"Ellos contestaron:"Unos que Juan Bautista, otros que Elías, otros que Jeremías o uno de los profetas." Él les preguntó: "Y vosotros, ¿quién decís que soy yo?"Simón Pedro tomó la palabra y dijo:"Tú eres el Mesías, el Hijo de Dios vivo."…
ENTRA EN TU INTERIOR
¿Quién dice la gente que es el Hijo del hombre? Y vosotros ¿Quién decís que soy yo? Estos interrogantes pueden ser el punto de partida para situarnos en el centro de la fe, de nuestra fe ¿Quién eres para mí?. Para interpelarnos y responder a la pregunta que nos hace, también hoy a nosotros, debemos interiorizar, entrar en nuestro corazón, en la experiencia personal y desde ahí es desde donde la respuesta nos surgirá, tal vez nos cuentes poner palabras a la vivencia personal de nuestra fe, pero debemos dejarnos llevar por su Amor, por nuestro amor.
Solemnidad de S. Pedro y S. Pablo, dos personas, dos historias distintas, dos conversiones antagónicas, dos apostolados que empiezan siendo diferentes, dos grandes columnas en que se apoya la fe de la Iglesia. Pensar en Pedro es pensar en el pescador, en el Apóstol del grupo de los doce, pero también es pensar en el discípulo que negará por tres veces a Jesús, pasa del miedo a la negación, a dar la vida por Él, a ser “piedra- base” de la Iglesia. En otro ángulo encontraremos a Pablo, Saulo de Tarso – el perseguidor-, y de seguro que nos vendrá a la memoria su conversión camino de Damasco, de perseguir a vivir la fe hasta la muerte.  Los dos, de forma diversa, creyeron y siguieron a Jesús con una fidelidad total.


domingo, 16 de junio de 2019


MISTERIO DE AMOR:
 DIOS UNO Y TRINO
Nuestra existencia es trinitaria desde el Bautismo:- Yo te bautizo en el nombre del Padre del Hijo y del Espíritu Santo. Nuestras eucaristías son trinitarias desde el saludo inicial del sacerdote: En el nombre del Padre del Hijo y del Espíritu Santo; el Gloria:- Gloria a Dios en el cielo…Señor Hijo único Jesucristo… Con el Espíritu Santo en la Gloria de Dios Padre. En nuestra profesión de fe (Credo) : - Creo en Dios, Padre todopoderoso…, Creo en Jesucristo…, Creo en el Espíritu Santo. Al terminar la oración “Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios, por los siglos de los siglos. Amen. Al recibir la bendición: - La bendición de Dios todopoderoso,+ Padre + Hijo y+ Espíritu Santo.
Las lecturas de este domingo nos enmarcan en el misterio de la Santísima Trinidad, así nos dice la sabiduría de Dios en la primera lectura del libro de los Proverbios: Dios anterior a la creación y creador desde el Amor. Dios por Amor se ha hecho cercano a los hombres, se ha hecho hombre, Dios Hijo (lectura Carta de S. Pablo a los Romanos). Y Dios Padre - Hijo nos da su fuerza, su aliento, El Espíritu (Evangelio Juan). Dios origen, principio- Padre-, Dios se hace uno de nosotros Hijo – Jesús- y Dios envía su espíritu, proyecta, dirige toda su fuerza y amor a cada uno de nosotros sus hijos- Espíritu Santo. Un Dios Trino, un Misterio de Amor para ser vivido, para ser experimentado, pues el Amor no se desgrana, se vive, se percibe. Este misterio nos recuerda que somos Hijos de Dios, hermanos de Jesús y templos del Espíritu Santo que habita en nuestro interior, en nuestro corazón.


domingo, 9 de junio de 2019





PENTECOSTÉS – LLEVADOS POR TÚ ESPÍRITU
Estando reunidos los discípulos, entró Jesús y les dijo  “Paz a vosotros”… como el Padre me ha enviado así os envío yo… Y sopló sobre ellos y les dijo: Recibid el Espíritu Santo
ENTRA EN TU INTERIOR
Los evangelios nos revelan a Jesús y la acción del Espíritu Santo en Él: “fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo “ “Nacido del Espíritu”, “Ungido con la fuerza del Espíritu” en el bautismo e inicio de su misión “El Espíritu le condujo al desierto”, “lleno de la fuerza del Espíritu regresó a Galilea” “ El Espíritu del Señor está sobre mí, porque me ha ungido, me ha enviado para anunciar la buena noticia…” ,“como el Padre me ha enviado así os envío yo..” , les envía y nos envía también hoy a llevar la buena noticia. Espíritu que se nos da, que se nos ofrece, que se nos regala, un gran don para compartir y  es Dios quien nos comparte ese gran don, quien nos envía el mayor regalo posible -Su Espíritu -, Espíritu de vida. Jesús es fruto del Espíritu, experiencia del Espíritu y nos lo ha revelado. Pentecostés es un tiempo privilegiado para invocar al Espíritu del Señor. Cincuenta días después de la Pascua y dando término al periodo pascual, este domingo celebramos Pentecostés,  conmemorando el descenso del Espíritu Santo y nos marca el nacimiento de la Iglesia, tiempo privilegiado para invocar al Espíritu : Ven Espíritu de Dios sobre mí, me abro a tu presencia, cambiarás mi corazón.


domingo, 2 de junio de 2019






 ASCENSIÓN: DEL JESÚS VISIBLE AL INVISIBLE
Dijo Jesús: Así está escrito: El Mesías padecerá, resucitará de entre los muertos… vosotros sois testigos de esto…los sacó hacía Betania y, levantando las manos…mientras los bendecía se separó de ellos subiendo al cielo
ENTRA EN TU INTERIOR
Con este relato concluye el evangelio de Lucas y configura el inicio del libro de los Hechos de los Apóstoles. La narración de la Ascensión nos relata los últimos momentos de Jesús con los suyos,  es la culminación del itinerario del Jesús visible y el tránsito al invisible que da origen al tiempo de la Iglesia, de la comunidad portadora y transmisora de la Buena Noticia, contagiando el estilo de vida de Jesús. La Ascensión del Señor da inicio a  una nueva forma de permanecer entre nosotros: en la Palabra, en el pan partido y compartido, en el rostro de cada hombre que sufre, en el que busca, ama y espera. Su mensaje no morirá porque se hace vida en nosotros  impulsándonos a hacer vivas sus palabras y sus gestos. La ausencia del Jesús visible no es el “vacío”, Jesús vuelve al Padre levantando sus manos y bendiciendo a sus discípulos. Es su último gesto, Jesús asciende y sobre el mundo desciende su bendición. Jesús asciende y nos deja la puerta abierta  hacia el Padre. En esta nuestra sociedad marcada por el afán  y la obsesión de ascender mediante privilegios imagen social etc… nos es bueno recordar que  para ascender primero hay que descender con humildad y con sencillez. Seamos pues portadores de la Buena Noticia y anunciemos que otra sociedad es posible, al estilo de Jesús.