Domingo 4 de Septiembre 2016

CONDICIONES PARA SER DISCIPULOS:

VACIARSE DE UNO MISMO PARA LLENARSE DE DIOS

Y Jesús les dijo: Si alguno se viene conmigo y no pospone a su padre y a su madre...incluso a si mismo, carga con su cruz, no puede ser discípulo mío.

ENTRA EN TU INTERIOR

Jesús nos propone un proyecto  de vida para ser discípulos, pero para asumirlo nos dice que no es un camino triunfal. Necesitamos vaciarnos de todas las ataduras externas, vaciarnos de nuestras comodidades, egoísmos, y llenarnos de Dios Amor.

Todo no lo hacemos mal, podemos estar en camino, pero seguimos en muchos casos siguiendo guardando nuestro pequeño tesoro (bienestar, estatus social, egocentrismo...) que nos detiene en nuestro ser discípulos. En numerosas ocasiones creemos que actuamos mirando al prójimo,  que tenemos desprendimiento hacia los necesitados, pero también es verdad que en demasiadas ocasiones estas acciones van ligadas a poder sentirnos “protagonistas” que nos de prestigio, amor propio.  Y es ahí donde Jesús nos dice que tenemos que vaciar las razones de “reconocimiento personal” , no quiere nuestra entrega superficial, el seguimiento debe ser total y desinteresado hacia los demás. Es el momento de ofrecer nuestro yo a Dios, el verdadero y real “yo”, sin las posesiones materiales y sociales que en demasiadas ocasiones nos bloquean a la invitación de Dios.

 ¿Qué valoro como más importante en mi vida? ¿Prevalece la fidelidad al evangelio o mis valores personales? ¿Cuáles son los cimientos en que baso mi fe?.

Cargar con la cruz para seguirle?... parece una exigencia desorbitada. Para Jesús cargar con nuestra cruz y seguirle, es ser consecuente como él lo fue. No se puede ser cristiano de cualquier manera. La Cruz no debe significar un  signo de muerte, sino de vida consecuente, de entrega desinteresada por Amor y con Amor.