miércoles, 31 de mayo de 2023
domingo, 28 de mayo de 2023
Vivir según el Espíritu
Santo, es difícil.
Vivir con el Espíritu
Santo, no lo es tanto.
Es bueno pensar que,
El,
nos acompaña, aunque no
nos demos cuenta;
nos habla, aunque no lo
escuchemos;
nos conduce, aunque
acabemos eligiendo el camino contrario;
nos transforma, aunque
pensemos que, todo, es obra nuestra.
VIVIR PENTECOSTÉS
es pedirle a Dios, que
nos ayude a construir
la gran familia de la
Iglesia
es orar a Dios, para
sacar de cada uno lo mejor de nosotros mismos
es leer la Palabra y
pensar: “esto lo dice Jesús para mí”
es comer la Eucaristía,
y sentir el milagro de
la presencia real de Cristo
es rezar, y palpar –con
escalofríos- el rostro de un Dios que nos ama.
¡PENTECOSTÉS ES EL DIOS
INVISIBLE!
El Dios que nos da
nuevos bríos e ilusiones
El Dios que nos
levanta, cuando caemos
El Dios que nos une,
cuando estamos dispersos
El Dios que nos atrae,
cuando nos divorciamos de El
El Dios que nos indica
con su consejo
El Dios que nos alza
con su fortaleza
El Dios que nos hace
grandes con su sabiduría
El Dios que nos hace
felices con su entendimiento
El Dios que nos hace
reflexivos con su santo temor
El Dios que nos hace
comprometidos, con el don de piedad
El Dios que nos hace
expertos, por el don de la ciencia
Pentecostés, entre
otras cosas, es valorar, vivir, comprender
y estar orgullosos de
todo lo que nos prometió Jesús de Nazaret.