domingo, 31 de diciembre de 2023
ACCIÓN DE GRACIAS
70 ANIVERSARIO INSTITUCIÓN DE LA PARROQUIA DE SAN ANTONIO DE
PÁDUA 1953-2023
Señor, haz crecer en todos los miembros de nuestra comunidad
parroquial el compromiso de escuchar, celebrar, testimoniar y anunciar tu
Palabra.
Que todos nosotros descubramos nuestra vocación de ser una
familia fraterna y acogedora, donde todos los que hemos sido bautizados y
confirmados, tomemos conciencia de ser tu Iglesia, Cuerpo y Pueblo tuyo, que
quiere ser sacramento de salvación para nuestros hermanos.
Que todos podamos encontrar en nuestra parroquia tu
presencia que nos hable, santifique, perdone, consuele y nos confirme en el
Espíritu, uniéndonos al Ministerio de la Pascua.
Haznos descubrir tus deseos sobre cada uno de nosotros:
hacia donde tenemos que dirigir nuestros esfuerzos, lo que tenemos que hacer,
en qué debemos trabajar y de qué debemos de ocuparnos para servir a los
hermanos, de modo especial a los más necesitados y, así, cumplir tu voluntad.
Señor, ayúdanos a escuchar personal y comunitariamente tus
deseos sobre nosotros, para que las decisiones de cada uno de nuestra Comunidad
Parroquial sean conformes a lo que tú esperas de nosotros. Amén
sábado, 30 de diciembre de 2023
Dios dice: Cada vez que nace un niño sigo confiando
en vosotros, porque entregaros un hijo es delegar mucho de mí en vosotros: es
haceros continuadores de mi obra, portadores de mi Espíritu, padres y madres de
mi Evangelio vivo y cuna del mundo al que tanto quiero.
Todo niño viene a través vuestro, y toda buena
noticia se encarna en vuestro seno, pero la fuente de la vida, que encontró
cauce en vosotros, tiene su origen en mis entrañas y el amor desbordado que a
veces os alcanza.
Acostumbraos, pues, a verme en ellos; en su frágil
transparencia son mi presencia que os ilusiona, mi navidad más humana, mi
palabra encarnada, verdaderos sacramentos en la historia.
En ellos abrazáis mi ternura echa carne vuestra en
ellos os solidarizáis con mi debilidad e impotencia, y también con mis sueños y
esperanzas más íntimas.
Deteneos de vez en cuando ante ellos, contempladlos
despacio: estáis ante el misterio de la vida, ante el milagro del amor, ante la
mejor buena noticia, gratuita.
Permanezco junto a vosotros, día y noche, empeñado en
cuidarlos, y cuidaros, con mimo para que crezcan y continúen mi obra, -la
vuestra, la nuestra, entendámonos-.
Contad siempre conmigo. Yo me alegro de poder contar
con vosotros.
Florentino
Ulibarri
2023 AÑO B TIEMPO DE NAVIDAD
SAGRADA FAMILIA
70 ANIVERSARIO DE LA CREACIÓN DE LA
PARROQUIA
Este año 2023, la
Fiesta de la Sagrada Familia, instituida por el papa León XIII, cumple 150
años. Este tiempo de Navidad está bien reflexionar sobre la familia, ya que son
fechas en que se reúnen las familias que pueden.
También hoy para
nuestra parroquia es un día especial, celebramos los 70 años de la erección
canónica de este templo en parroquia. 70 años de vida comunitaria, de vida
solidaria, de acogida y disponibilidad. En definitiva 70 años de vida familiar
parroquial.
La Sagrada familia se
convierte en modelo de familia, que, aunque sabemos muy poco de ella, sabemos
que fue una comunidad de vida y amor. Jesús nació en esa familia y en ella,
creció en estatura, sabiduría y gracia. Jesús, en eso y en todo, fue igual a
nosotros. Por eso podemos ser como él, hacer lo que él hizo y como él lo hizo.
Como parroquia estanos
llamados a ser una comunidad que compartamos la vida de fe, de caridad y de
esperanza. Estamos llamados a impulsar el crecimiento de todos los que formamos
parte, mientras crecemos en estatura, la parroquia debe favorecer el
crecimiento en sabiduría, en bondad y gracia de Dios.
Al igual que todo
empezó en Nazaret. La familia de Jesús fue una familia normal judía en la
Palestina del siglo I, en una cultura mediterránea, bajo el Imperio romano, en
un modelo romano de familia patriarcal. En nuestra cultura la familia es el
clima apropiado para el desarrollo de la persona humana. Es un marco de humanización,
de un desarrollo normal, sano y evolutivo. Los humanos quedamos marcados por
las experiencias primarias en la familia. La maduración es costosa, no se
regala nada en la vida. Pero merece la pena.
También la parroquia
intenta atender a la familia de hoy con sus crecimientos, sufrimientos,
felicidades y frustraciones. La familia es un sacramento. Un signo de lo que es
Dios en ella y en nosotros. Un lugar privilegiado para experimentar una imagen
viva y activa de Dios: Una Presencia amorosa y cuidadora. Esta es la Parroquia
abierta a todas las necesidades de los que la componemos. Toda familia es
divina si es verdaderamente humana.
No tenemos otra manera
de venir al mundo, de crecer, de madurar y ello forma parte del misterio de la
creación de Dios. Hacer de la familia cristiana una relación de amor, respeto,
comprensión, cuidado y ayuda. Todo modelo de familia que favorezca el
desarrollo humano es cristiano.
También la parroquia es
el lugar natural de entrar a una relación de vida íntima y de conocimiento de
Dios. Agradecer a tantos frailes y párrocos que sirvieron a este pueblo de Dios
situado en nuestra demarcación parroquial y de nuestra ciudad. Agradecer a
tantos laicos que se comprometieron y se comprometen en la tarea pastoral de la
Iglesia, en la catequesis, en la animación litúrgica, en el servicio de la
caridad, los distintos grupos parroquiales. Felicidades a todos y que
continuemos unidos en el respeto, en el amor y el cariño.
miércoles, 27 de diciembre de 2023
2023 DICIEMBRE ADORACIÓN EUCARISTICA.
La Navidad nos viene por María
Señor Jesús
delante de ti sacramentado y niño recién nacido nos reunimos para estar contigo
y sentir tu presencia en todos los momentos de la vida. En estos días de
Navidad donde la alegría anida en nuestros corazones por saber que tu viniste y
te quedaste para siempre compartiendo nuestras felicidades, amarguras y
tristezas. Sabemos que tu madre, la Virgen María fue esencial para que se diera
el milagro de la Navidad, hoy queremos pensar en ella y sentirla muy cerca de
los dos.
La Navidad nos viene por María:
La rueda del tiempo no se para. Los meses cogen carrerilla. Al principio lo
tomamos con calma. Pero luego vamos tomando un ritmo ligero y cuando nos damos
cuenta estamos en los aledaños del invierno. Este tiempo de mil nostalgias, con
sus colores amarillos de oro viejo, que nos hablan del invierno y de esta
Navidad toda de blancura y paz.
¡Navidad!
¡Navidad! No la comercial. La de los perfumes, colonias, comilonas o guateques
a mansalva. No. La otra. La más recogida. La pobre y humilde. La más cercana a
la verdadera. La que vivieron María, José y la borriquilla, con el buey y la
mula, y los pastores de Belén, que corrieron para contemplar al Mesías del
mundo.
La Navidad de
Jesús de Nazaret. La del Niño Dios. Aquel niño de perlas. El que nació en el
corazón de la noche, al amparo de las estrellas, con el gemido de su madre, el
silencio de José y el asombro de los animales. La de los pastores que, locos de
alegría, por la buena noticia recibida del Ángel, caminan con ligereza, al
portalito de Belén.
Esta Navidad
la necesitamos como el pan. Lo mismo que el oxígeno en medio de un mundo que se
nos va haciendo irrespirable. Un mundo estresado, en el que tanta crisis,
engaños y mentiras, nos roen los sentimientos más nobles del alma. Y nos vamos
sangrando lentamente. Cada día con la tez más blanca y amarilla. Necesitamos la
vida. Pero no una vida cualquiera. Una vida sana La que viene de Dios. Una vida
profundamente humana, trascendente y divina.
Esta Navidad
fue posible por una jovencita que se abría a la vida. María de Nazaret. La
Virgen María. La pobre de Jhavé. La humilde. La Inmaculada. La que esperaba con
Israel y con toda la humanidad la venida del Mesías. El Salvador. A esta Virgen
que recibió en su alma y en su cuerpo al Verbo de Dios y nos entregó a
Jesucristo, le rezo yo en esta Navidad: Santa María, haz posible en nuestras
vidas y en nuestro mundo el milagro del nacimiento del Hijo de Dios.
YO TE SALUDO, MARÍA
Yo te saludo, María,
porque el Señor está contigo:
en tu casa, en tu calle, en tu pueblo,
en tu abrazo, en tu seno.
Yo te saludo, María,
porque te turbaste
–¿quién no lo haría ante tal noticia? –
mas enseguida recobraste paz y ánimo
y creíste a un enviado cualquiera.
Yo te saludo, María,
porque preguntaste lo que no entendías
–aunque fuera mensaje divino–
y no diste un sí ingenuo ni un sí ciego,
sino que tuviste diálogo y palabra propia.
Yo te saludo, María,
porque concebiste y diste a luz
un hijo, Jesús, la vida;
y nos enseñaste cuánta vida
hay que gestar y cuidar
si queremos hacer a Dios
presente en esta tierra.porque te dejaste guiar por el Espíritu
Yo te saludo, María,
y permaneciste a su sombra,
tanto en tormenta como en bonanza,
dejando a Dios ser Dios
y no renunciando a ser tú misma.
Yo te saludo, María,
porque abriste nuevos horizontes
a nuestras vidas,
fuiste a cuidar a tu prima,
compartiste la buena noticia,
y no te hiciste antojadiza.
Yo te saludo, María.
¡Hermana peregrina de los pobres de Yahvé, camina
con nosotros,
llévanos junto a los otros
y mantén viva nuestra fe!
Florentino
Ulibarri
lunes, 25 de diciembre de 2023
Tienes el cielo como
casa, y te aventuras a dejarlo para caminar junto a nosotros.
¿No ves, Señor, cómo
estamos?
El hombre, mata al hombre.
Tu mundo, ya no es aquel
que Tú creaste.
La vida, ya no es vida.
Una corte de ángeles te
rodea y prefieres nacer, en medio de la indiferencia de los hombres, sin más
homenaje que el ruido de las guerras, y las contiendas o indiferencia de las
naciones.
Posees el calor celestial
y te adentras en el frío de la tierra.
Destellas la grandeza de
tu ser Dios y te revistes de nuestra pobreza.
Eres Dios y, quieres ser
hombre.
Vives en la Ciudad Eterna
y deseas caminar a pie de tierra.
Hablaste durante siglos
sin dejarte ver, y, ahora, te descubrimos en un Niño.
Eras intocable, y te
dejas acariciar.
Eras invisible, y te
podemos adorar.
Estabas más allá de las
nubes, y, te contemplamos en un pobre pesebre.
Déjanos por lo menos,
Señor, conquistarte con la fuerza de nuestro amor, calentarte con la hondura de
nuestra fe, abrigarte con la esperanza que nos traes, responderte, con la
humildad de nuestros corazones.
El mundo, hoy más que
nunca, te necesita como salvación.
Tu llegada es motivo para
la alegría.
¡Gracias por salir a
nuestro paso!
Amén.
2023 AÑO B TIEMPO DE NAVIDAD.
DIA DE NAVIDAD
Hoy es Navidad, que en
este día dejémonos llevar por el gozo, por la alegría que impregna el ambiente.
Que no nos lo quiten.
Nuestra celebración es
el Dios que se encarna, la Palabra se hizo hombre por nosotros, para llevarnos
al gozo de la divinidad. Sin embargo, nuestro cariño y nuestra solidaridad para
quienes no pueden estar contentos porque pasan pruebas y dificultades. ¡Es
fácil gritar y predicar la alegría cuando no tienes ningún problema muy grande!
Especialmente recordamos a quienes estas Navidades sufren por la guerra, por el
hambre, por la falta de vivienda, por la discriminación.
Hemos escuchado un
Evangelio inmenso, que nos obliga a pensar en grande. Juan comienza con un
himno, un canto, que nos llama a volar alto, un vuelo de águila.
En el principio era el Verbo y el Verbo era Dios. En el principio y en las profundidades, en el
tiempo y fuera del tiempo: todo fue hecho por medio de Él. Nada sin Él. "En el principio", "todo",
palabras absolutas, que nos ponen en relación con la totalidad y la eternidad,
con Dios. Nada ni nadie ha nacido de sí mismo.
Navidad: vino al mundo la luz verdadera, la luz que ilumina a todo hombre. Cada hombre,
cada mujer, cada niño, todos, nadie excluido; ninguna existencia carece de una
pizca de esa luz. Hay un fragmento del Verbo en cada carne, un trozo de Dios en
cada hombre.
No nos dejemos arrebatar esta alegría de ser y de
compartir con los hermanos
porque en ello está la presencia del Dios encarnado y él es la luz del mundo.
Nos cuesta tanto entrar en la aventura de encontrarnos con Dios. A veces nos
quedamos siempre a cierta distancia.
La Navidad nos recuerda que lo humano y lo divino no se excluyen mutuamente. No tenemos que dejar de
ser humanos para ser de Dios. Lo humano es la puerta que nos permite entrar
en lo divino. Pero escuchemos bien la advertencia del evangelista. La
Palabra de Dios vino al mundo, y el mundo no la conoció; vino a su casa, y los
suyos no la recibieron. No nos desesperemos, si nos cuesta ver avanzar
a este Reino. Lo único que podemos hacer es seguir luchando por hacerlo real.
La luz brilla en las
tinieblas. La noche no vence al día: las tinieblas no vencen.
Jesús es la historia de
la ternura de Dios, trae la revolución no de la omnipotencia o la perfección,
sino de la ternura y la pequeñez: Dios en la humildad, es el secreto de la
Navidad.
Jesucristo nos comunica
la gran generosidad y gratuidad de Dios; y a nosotros nos ha hecho el don de
poder acogerla. Pero fijémonos: poder acogerla. Ninguna obligación, ninguna
exigencia. Dios nos deja la libertad de seguirle. No podía ser de otro modo si
hablamos de un Dios manifestado en un niño, en humildad y debilidad. La Gracia
y libertad son también los dones de Navidad. Gracia porque todo es gratis: Porque sí.
Feliz Navidad hermanos, el Señor
está siempre con nosotros, ahora y siempre.